El acero es el material para uso de ingeniería y construcción más importante del mundo. Puede reciclarse una y otra vez sin perder sus propiedades.
Otros elementos de aleación, como cromo, níquel o molibdeno, se pueden agregar intencionalmente a las piezas forjadas de acero para producir propiedades específicas como alta resistencia, tenacidad a la fractura, fatiga y resistencia a la corrosión. El proceso de forja es fundamental para el pleno desarrollo de las propiedades mecánicas, en particular para producir componentes libres de defectos internos.
En FRISA estamos orgullosos de estar certificados bajo la norma ISO 9001:2015 y AS 9100. Nuestro enfoque en la calidad y el servicio al cliente nos permiten producir piezas forjadas que cumplen con los más altos estándares de calidad superando así las expectativas de nuestros clientes.